La ONU alerta de que tres cuartas partes de la población con inseguridad alimentaria viven en zonas urbanas y periurbanas
Un informe del Comité de Seguridad Alimentaria Mundial (CFS) de la ONU insta a las áreas metropolitanas a coordinarse para mejorar sus sistemas alimentarios y reconoce la labor de la Oficina Conjunta de Alimentación Sostenible (OCAS).
Más de la mitad de la población mundial vive en ciudades y, más importante aún, consume alrededor del 70 % de los alimentos que se producen. Poner la mirada en los sistemas alimentarios urbanos y periurbanos se vuelve cada vez más crucial, en especial porque en estas áreas 1.700 millones de personas, es decir, tres cuartas partes de las personas que viven en zonas urbanas y periurbanas, se enfrentan a la inseguridad alimentaria.
El informe “Fortaleciendo los sistemas alimentarios urbanos y periurbanos para alcanzar la seguridad alimentaria y la nutrición en el contexto de la urbanización y la transformación rural”, publicado por el Grupo de Expertos de Alto Nivel en Seguridad Alimentaria y Nutrición (HLPE-FSN) del Comité de Seguridad Alimentaria Mundial de las Naciones Unidas, pone de manifiesto esta cuestión.
El estudio desafía las narrativas predominantes y constata que, contrariamente a la creencia común, las áreas urbanas son más vulnerables a la inseguridad alimentaria y a la malnutrición que las rurales. De hecho, alerta de la necesidad urgente de políticas específicas para abordar las complejidades de los sistemas alimentarios urbanos y proporciona una hoja de ruta para los responsables políticos para garantizar el derecho a la alimentación.
Recomendaciones más destacadas
A partir del informe, la ONU recomienda integrar los sistemas alimentarios en la planificación urbana y asegurar que la política alimentaria urbana se centra en las necesidades de una dieta saludable y asequible, también para los grupos de personas vulnerables. Además, insta a reconocer el apoyo de todos los agentes que forman el sistema para ayudar a implementar mejoras.
Finalmente, añade que hay que considerar la inversión en sistemas digitales para mejorar la base de pruebas para la toma de decisiones políticas mientras se protege el empleo digno en los sistemas alimentarios.
La OCAS como ejemplo de gobernanza multinivel
Más allá de las unidades alimentarias urbanas coordinadas dentro del gobierno local y a través de las áreas metropolitanas, el informe también pone el énfasis en la importancia de los mecanismos de alineación entre los diferentes niveles de gobierno, esenciales para asegurar la coherencia de las políticas y un uso eficaz de los recursos.
Entre los diferentes mecanismos que se han puesto en marcha, el informe destaca la Oficina Conjunta de Alimentación Sostenible, un instrumento a través del cual se coordinan políticas, programas e intervenciones entre el Ayuntamiento de Barcelona, la Generalitat de Catalunya y el Plan estratégico metropolitano de Barcelona (PEMB).
El ámbito territorial de acción de esta oficina se centra en Barcelona y la región metropolitana, dado su alto volumen de consumo de alimentos, aunque también se trabaja para generar el máximo de sinergias y complicidades posibles con el resto de territorios del país.
