La Estrategia de Alimentación Saludable y Sostenible Barcelona 2030: la hoja de ruta a seguir para transformar el sistema alimentario de la ciudad
Más de 1.000 personas han participado en el proceso de elaboración de la estrategia, entre noviembre de 2021 y julio de 2022.
El Ayuntamiento de Barcelona, en colaboración con el Plan Estratégico Metropolitano de Barcelona (PEMB), ha presentado hoy la estrategia de alimentación saludable y sostenible Barcelona 2030. El evento ha estado presidido por la alcaldesa Ada Colau, junto con la concejal de Comercio, Mercados, Consumo, Montserrat Ballarín, y el Comisionado de Economía Social, Desarrollo Local y Política Alimentaria, Álvaro Porro.
Este documento final, que ha sido el resultado de un amplio proceso participativo con representantes de muchos de los agentes involucrados en el sistema alimentario, es la hoja de ruta compartida durante los próximos 8 años en el campo de las políticas alimentarias en la ciudad. De hecho, involucra tanto al Ayuntamiento como al resto de actores participantes y recopila la visión, los objetivos, las líneas de trabajo y algunos ejemplos de proyectos que deben guiar la transformación del sistema alimentario de la ciudad en el futuro más inmediato y también, en el largo plazo.
La intención es que esta estrategia sirva como base para desarrollar planes de acción de más corta duración para aquellos agentes que la adopten como marco de visión compartida.
El nuevo sistema alimentario de Barcelona: 9 objetivos para trabajar
El objetivo principal de la estrategia es tener un sistema alimentario con modelos de producción y consumo más sostenibles y dietas más saludables. Un sistema transparente, participativo, resiliente, seguro, con relaciones justas y equitativas, inspirado en la agroecología, que haga frente a la emergencia climática y a la crisis de extinción, y que evite las pérdidas y el despilfarro de alimentos.
Al final, lo que se quiere conseguir es que todas las personas tengan acceso a alimentos saludables, ecológicos, de temporada, de proximidad, de pesca sostenible, que garanticen el bienestar animal y que se distribuyan prioritariamente en cadenas más cortas, justas y equilibradas. Y que el sistema alimentario pueda incluir unas personas consumidoras conscientes y empoderadas.
Por esta razón, el documento establece 9 objetivos que se elaborarán a través de 54 líneas de trabajo y 265 acciones.
Los objetivos son:
- Incrementar la producción, venta y consumo de alimentos de temporada, de proximidad, ecológicos, sostenibles y con bienestar animal, así como la distribución en cadenas más cortas, justas y equilibradas.
- Proteger, recuperar y promover espacios para la agricultura urbana y periurbana.
- Promover una dieta saludable y sostenible para todas las personas.
- Aumentar la resiliencia del sistema alimentario y garantizar el derecho a una alimentación saludable y sostenible.
- Prevenir las pérdidas y el despilfarro alimentario.
- Luchar contra la emergencia climática y la crisis de extinción.
- Promover un cambio cultural y educativo hacia la alimentación sostenible.
- Fomentar las relaciones justas dentro de la cadena alimentaria.
- Coordinar y movilizar a los agentes del sistema alimentario para llevar a cabo acciones concretas y evaluables, vinculadas a las estrategias existentes.
Propósitos cuantitativos para llegar a 2030
Para cuantificar el impacto de las acciones y como indicadores de seguimiento, el Ayuntamiento de Barcelona contempla un total de 11 propósitos para desarrollarse desde ahora hasta 2030. Estos propósitos son:
- Alinear el 100% de la compra pública municipal con la alimentación sostenible inspirada en la dieta de salud planetaria.
- Fomentar que el 40% de la población de la ciudad de Barcelona consuma regularmente alimentos de proximidad, partiendo del 20% actual.
- Fomentar que el 30% de la población de la ciudad de Barcelona consuma regularmente productos de alimentación ecológica, partiendo del 14.5% actual.
- Colaborar con los agentes clave del Área Metropolitana de Barcelona para aumentar el porcentaje de suelo agrario hasta llegar a un 13-15%, partiendo del actual 9.3%.
- Movilizar los agentes clave en la demarcación de Barcelona para incrementar el porcentaje de suelo agrícola dedicado al cultivo de producción ecológica hasta llegar al menos a un 25%, partiendo del 12% actual.
- Contribuir a aumentar el porcentaje de población de la ciudad de Barcelona que sigue una dieta de salud planetaria hasta llegar al 23%, partiendo del 9% actual.
- Trabajar para reducir el porcentaje de obesidad en la ciudad de Barcelona hasta el 12% respecto el 15,4% actual y con acciones específicas en los vecindarios de mayor prioridad.
- Movilizar a los agentes para introducir cambios en los menús de comedor del 75% de los centros de infantil y primaria públicos y concertados de la ciudad, con los criterios de alimentación sostenible y saludable.
- Trabajar para eliminar la inseguridad alimentaria en la ciudad de Barcelona, sabiendo que esta problemática afectaba a un 8,6% de la población en 2016.
- Reducir en un 50% las pérdidas y el despilfarro alimentario en la ciudad de Barcelona respecto los datos de 2015.
- Fomentar la reducción de la huella de carbono de la alimentación en la ciudad de Barcelona en un 15%, respecto a datos de 2021.
Una estrategia consensuada entre los diversos agentes involucrados en el sistema alimentario
Esta hoja de ruta surge de un amplio proceso participativo en el que han contribuido representantes de los diversos agentes que participan en el sistema y que ha permitido consensuar el documento. Lo que se busca es guiar y hacer visibles las acciones de todos los agentes que desean ayudar a transformar el sistema alimentario y ofrecer un espacio para tejer complicidad y facilitar la cooperación entre agentes y proyectos.
Estos actores han sido las administraciones públicas, el sector privado, el mundo académico y de la investigación, la ciudadanía y sus organizaciones, y los medios de comunicación, así como de los diversos sectores (salud, medio ambiente, justicia social, cultura, economía) y fases de los alimentos cadena (del campo al plato).
En total, 1.053 personas han tomado parte en el proceso de elaboración de esta EASSB2030, entre noviembre de 2021 y julio de 2022. Se han organizado 23 sesiones de trabajo, en las que han participado 198 personas y 112 organizaciones vinculadas al sistema alimentario. La consulta ciudadana en línea recolectó 834 contribuciones.
Además, 25 personas del ámbito agrario y 16 personas del ámbito académico y de la investigación han participado en las sesiones de trabajo durante la elaboración de la estrategia. El 76.9% de los que contribuyeron a esta estrategia son mujeres. Finalmente, también se ha celebrado una sesión interadministrativa con la participación de la Generalitat, el Área Metropolitana de Barcelona y las cuatro diputaciones provinciales de Cataluña.
Barcelona está avanzando en su compromiso de hacer frente a la emergencia climática
Con esta estrategia alimentaria, la ciudad fortalece y consolida en el tiempo su compromiso por la alimentación sostenible como estrategia para luchar contra la emergencia climática.
Para garantizar esta continuidad y, como prueba del compromiso firme del Ayuntamiento, inaugurado con la Capitalidad, se consolida un presupuesto anual, así como un departamento específico en el Ayuntamiento de Barcelona. Sin embargo, se establecerán referentes técnicos especializados para trabajar para la alimentación sostenible en órganos estratégicos como el Consorcio de Educación de Barcelona, el Instituto de Mercados, Mercabarna o la Agencia de Salud Pública de Barcelona, así como instrumentos estables de colaboración con la Generalitat de Catalunya o el Área Metropolitana de Barcelona.
Esta iniciativa se enmarca proyecto que ha desarrollado la ciudad como Capital Mundial de la Alimentación Sostenible el año 2021 y es uno de los legados de esta Capitalidad.